martes, 17 de junio de 2014

Mitos del Pop. Museo Thyssen Bornemisza. Del 10 de junio al 14 de septiembre de 2014.



Richard Hamilton, ¿Qué es lo que hizo que los hogares de ayer fueran tan diferentes y tan atractivos? (Just what is it that makes today's homes so different, so appealing?), 1992 (basado en el collage de 1956), kunstmuseum Winterthur. Donación de Dr. Frank y Wiltraud Rentsch, 2010.

"El pop art es: popular, efímero, prescindible, barato, producido en serie, joven, ingenioso, sexy, divertido, glamuroso, un gran negocio". Richard Hamilton, 1957.



Hamilton describe con apenas once adjetivos qué es el Pop. Sin duda un revulsivo artístico en un tiempo en el que los anhelos heróicos y la alta cultura pasan a mejor vida. Los artistas del  Pop Art rompen los límites entre la elite cultural y la cultura de masas y popular de una manera divertida, un tanto excéntrica en ocasiones, pero curiosamente mirando al pasado y a la tradición mediante homenajes o parodias irreverentes.


Mimmo Rotella, Cleopatra, 1963, Décollage sobre lienzo, Colección privada.

La primera sección de la exposición se centra en el collage, la publicidad y el cómic. Para el Pop toda imagen sirve de inspiración creadora. Heredan técnicas como el collage, procedente del dadaísmo y el cubismo, y abrazan nuevos medios de difusión de la obra ilustrada como son el diseño gráfico procedente de la publicidad y el cómic. Obras de Roy Lichenstein, Andy Warhol y Richard Hamilton, probablemente la gran triada del Arte Pop, copan casi toda esta sección y, en definitiva, la práctica totalidad de la muestra. 


Andy Warhol, lata grande de sopa Campbell's rasgada (black bean), 1962, acrílico sobre lienzo. Kunstsammlung Nordhein-Westfalen, Düsseldorf.

"El ser humano ha fabricado continuamente mitos. Las sucesivas mitologías han ido construyendo explicaciones para cada entorno existencial de la Humanidad. También la propuesta radical del Pop Art se basó en gran medida en la construcción del mito. Si consideramos que su novedosa fórmula para analizar el universo secularizado de la contemporaneidad a tarvés de nuevos modos de representación sigue aún vigente en el arte, podríamos afirmar que el pop, la tendencia artística que más se preocupó por los mitos modernos, terminó convirtiéndose en un mito en sí mismo." Paloma Alarcó, comisaria de la muestra en Descubrir el Arte, año XVI nº 184 Junio 2014., p. 54.

Emblemas es el título de la segunda sección, donde los eslóganes que dominan los medios son el asunto protagonista. Después mitos, con los retratos más conocidos del star-system hollywoodiense como Marilyn, james Dean o Liv Taylor, en el fondo no dejan de ser imágenes de su propia marca, sujetos convertidos en objetos del consumo  más salvaje. Los actores y músicos se convierten en ídolos venerados por la sociedad moderna, al igual que marcas como Coca-cola o los personajes de la factoría Disney siguen siendo adorados hoy día por millones de consumidores.


Robert Rauschenberg, Retroactivo II, 1963, óleo, serigrafía y tinta sobre lienzo. Colección. Museum of Contemporary Art Chicago. Donación parcial de Stefan T. Edis y H. Gael Neeson. 

A partir de aquí, la exposición aborda la reinterpretación Pop de los tradicionales géneros artísticos como el retrato, el bodegón, el desnudo o la pintura de historia. El retrato, al basarse en imágenes previamente existentes, abraza la pos modernidad y va adoptando la idea del simulacro; el bodegón abandona los espacios íntimos del siglo de oro para volcarse en la imagen urbana y comercial; el erotismo del desnudo nuevamente se centra en lo urbano, en la mujer como símbolo sexual, aunque en algunos casos con un toque de crítica hacia la banalidad, hacia la superficialidad y el hedonismo excesivo al que lleva la publicidad y los medios de masas; por último, el pop realiza un reflexión sobre la historia pasada y presente, a través de los grandes nombres y de los nuevos medios artísticos el pop se vuelve político e irónico, como en la obra del Equipo Realidad. 


Equipo Crónica, La salita, 1970, acrílico sobre lienzo, Colección de la Fundación Juan March. Museu Fundación Juna March, Palma.

La última sección de la exhibición se centra en la reflexión del Arte sobre el arte, es decir, cómo los artistas del Pop hacen reflexionar al espectador sobre la evolución de nuestra mirada sobre las obras de arte de los maestros antiguos, aportando una cierta mirada crítica y siempre provocadora.

En España el Equipo Crónica se encarga de desmitificar la obra más emblemática de nuestra tradición pictórica: Las meninas de Velázquez. El colectivo redefine la obra para realizar una mordaz critica política ante la recuperación del Siglo de Oro por parte del régimen franquista. Paloma Alarcó explica cómo estos artistas sitúan a las figuras en un espacio opresivo y cerrado, tan distintos del original, eliminando los juegos visuales de la obra velazqueña y reduciendo a los protagonistas a meros monigotes que no interactúan con el espectador. En definitiva, el pop en España se vio abocado a ser manifiestamente político.

La muestra concibe el Pop como un todo, en un afán globalizador tan propio de un museo como es el Thyssen. Es por ello que brindan la oportunidad no sólo de ver a los iniciadores británicos y americanos del Pop, sino también de explorar cómo fue entendido el movimiento en otros países como Alemania,  Italia, Francia y España. Si tenéis la oportunidad, non dejéis de visitar esta muestra que, junto con la dedicada a Richard Hamilton en el Reina Sofía, harán de Madrid la capital Pop del verano.


Juan Genovés, El abrazo, 1976, acrílico sobre lienzo. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid.

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