La familia del pintor, de Martinez del Mazo.

Juan bautista Martínez del Mazo, La familia del pintor, 1665, Kunsthistorisches Museum, Viena.

Se trata de la familia de Diego Velazquez, que hemos podido ver en la exposición de Velázquez y la familia de Felipe IV recientemente finalizada en el Museo del Prado. Es una pintura obra del yerno de Velázquez, Juan Bautista Martínez del Mazo (Beteta?, Cuenca, h.1611-Madrid, 1667). El lienzo se encontraba en las colecciones reales desde su adquisición en Italia en 1800, hoy día forma parte de la colección del Kunsthistorisches Museum de Viena.

Con motivo de la exposición, el Museo del Prado celebró a comienzos de febrero una conferencia en la que se realizaba un muy interesante análisis de quiénes eran los protagonistas de este cuadro. La ponente era la investigadora y doctora en historia del arte Raquel Novero Plaza, y me gustaría compartir con todos vosotros, como ya va siendo habitual, lo que allí se dijo.

 Martínez del Mazo se forma en el taller de Velázquez, discípulo más aventajado en su pincelada y estilo. Sus primeras nupcias fueron con Francisca Velázquez, con la que tuvo nueve hijos de los que sobrevivieron cinco (Inés Manuela, Gaspar, Baltasar, María Teresa y Melchor). Ella fallece el 9 de diciembre de 1653. Se casa en segundas nupcias con Francisca de la Vega, con la que tuvo cuatro hijos (Juan Antonio, Luis, Francisco y Fernando Felipe), aunque ella también fallecería, el 22 de marzo de 1665. Nuevamente contrae matrimonio con Ana de la Vega. El pintor muere en 1667.

Al igual que Velázquez realizó Las Meninas, esta obra es la réplica de Martínez del Mazo a su maestro. Es de gran importancia por la presencia de los descendientes de Velázquez. En la obra de Velázquez desconocemos que está pintando el sevillano, y en este lienzo vemos que realiza uno de los retratos de la infanta Margarita que hemos podido ver en la exposición. Como en Las Meninas, Felipe IV se encuentra en el centro de la composición. Su importancia también reside en que es uno de los pocos retratos de grupo del siglo XVII en España. En el ángulo superior izquierdo aparece el escudo de "El Mazo", testimonio de pertenencia del pintor a una familia de hidalgos del norte de España.

La pintura no está fechada, aunque alrededor de 1651-52, también se ha mencionado 1659-60, pero es probable que la más acertada sea 1665 al analizar los personajes que aparecen en el cuadro. 

En primer término vemos un espacio amplio y diáfano, al fondo se encuentra el obrador del artista, con una ventana y puerta al frente. Es el taller del pintor en la Casa del Tesoro, en teoría el mismo que ocupó su maestro Velázquez, y que nos recuerda al espacio que vemos en Las hilanderas por la luz  los escalones que dividen las estancias (aunque concebidas desde distintos puntos de vista).

Colgado en la pared aparece el retrato de Felipe IV. Se trata de un doble homenaje al rey  y a su suegro y admirado maestro. El busto es el de la emperatriz Faustina la Mayor. El paisaje que aparece sobre el retrato del rey podría ser obra de Martínez del Mazo.

Juan Bautista Martínez del Mazo, La infanta Margarita, hacia 1665, Museo Nacional del Prado.

El cuadro del obrador, como mencionamos anteriormente, es el retrato de la infanta Margarita conservado en el Prado, y que por muchos años fue atribuido a Velázquez. Nos recuerda que Martínez del Mazo fue pintor de cámara de Felipe IV desde el 29 de abril de 1661.

Los 9 personajes que aparecen en primer término se pueden dividir en 3 grupos. El primero serían los 4 jóvenes a la izquierda; el segundo los dos niños;  el tercero y último, la mujer con dos pequeñas a su derecha.

Los 4 jóvenes son los hijos que tuvo con su primera mujer, los nietos de Velázquez, vestidos de forma elegante y sobria propia de la corte como exigía Felipe IV. Martínez del Mazo y Francisca Velázquez vivieron en las cercanías de la parroquia de la Santa Cruz, donde fueron bautizados la mayor parte de sus hijos al ser la más cercana a su domicilio en la calle Concepción Jerónima. Dentro del grupo, a la izquierda y de perfil el nieto mayor, Gaspar, el que más parecido físico tenía con su abuelo, después aparece Baltasar, y delante de ellos el pequeño del matrimonio, Melchor, cuyos padrinos fueron sus abuelos maternos (Francisca Pacheco y Diego Velázquez). El último de los personajes de este grupo es María Teresa, que toca con su mano derecha un broche, posiblemente perteneciente a su madre.

Los dos niños del segundo grupo son Juan Antonio y Luis, hijos de su segundo matrimonio. Juan Antonio luce un cuello valona (el lechuguina estaba en desuso) a la moda de la corte, con botas de campo altas al modo de un pequeño guerrero. Su hermano Luis viste de forma humilde, con sayo abotonado, cuello de valona, calzón hasta media pierna, medias y zapatos, ofreciendo una naranja a su hermano y sosteniendo una vara larga en su otra mano, propia de pastores y bolleros (viste como un campesino labrador, probablemente en referencia a la cercanía de la festividad de San Isidro).

El último grupo lo forma la mujer sentada y dos niños. El mayor es Francisco, el tercer hijo de su segundo matrimonio, vestido como un adulto, sosteniendo con la mano derecha un pajarito y con la izquierda una espada. La mujer podría ser Juana Pacheco, Francisca Velázquez o Ana de la Vega. Si consideramos la fecha de 1665 como la de autoría de la obra por la edad de los personajes, es posibe que se tratara de la nieta mayor de Velázquez, Inés Manuela, de unos 27 años aproximadamente en aquella época.

En el espacio del fondo, donde se encuentra el pintor, se identifica a Francisca de la Vega, su hijo Fernando Felipe y Juan Bautista Martínez del Mazo afanándose en la obra del mismo modo que su maestro lo hizo en Las Meninas. En definitiva una de las mejores obras del XVII español que hemos podido disfrutar en Madrid antes de su vuelta a Viena.