Ricky Nierva. Estudios de color de Mike (Monstruos, S.A., 2001). Rotulador y lápiz sobre fotocopia. Disney/Pixar
La muestra, presentada por primera vez en el MoMA de Nueva York con gran éxito, ha pasado por algunos de los mejores museos del mundo. Ahora podemos disfrutarla hasta el 22 de junio en el Caixa Forum Madrid.
Greg Dykstra. Carl (Up, 2009). Resina de uretano. Disney/Pixar
La exposición del Caixa Forum nos da la oportunidad de sumergirnos en los entresijos de una gran película de animación. El viaje abarca desde los primeros bocetos de los personajes, pasando por modelos en resina, los guiones que crean el alma de la película, hasta las novedades tecnológicas creadas para animar a personajes y su mundo. La sensación que produce es que detrás de cada plano, de cada escena, hay una cantidad de esfuerzo y de horas de trabajo invertidas realmente abismal.
Ralph Eggleston, Colorscript o paleta de color: un día de trabajo (WALL-E, 2008) ilustración digital. Disney/Pixar
Pixar se fundó en los años ochenta revolucionando el cine de animación con la tecnología más avanzada apoyada en el arte más tradicional. De tal modo, en la compañía trabajan decenas de artistas los dedicados al dibujo, la pintura, la escultura o el papel, los responsables de concebir las historias que fascinan a millones de niños y adultos a lo largo del mundo. El director creativo, John Lasseter, es el encargado de organizar a todo ese equipo bajo tres directrices fundamentales o conceptos claves: personaje, historia y mundo. Al diseñar los personajes lo más importante es captar la esencia de alguien, crear vida, seres con alma y personalidad, y así el espectador podrá empatizar con los protagonistas del filme.
Bud Luckey, con color de Ralph Eggleston. Woody (Toy Story, 1995). Técnica mixta. Disney/Pixar
"Los ordenadores no crean la animación por ordenador, del mismo modo que el lápiz no crea la animación a lápiz. El que crea la animación por ordenador es el artista" "El arte pone a prueba la tecnología y la tecnología inspira al arte." John Lasseter, director creativo de Pixar Animation Studios.
Los organizadores de la exposición quieren transmitir que la labor artística tradicional no es incompatible con los avances técnicos. Los desafíos que plantea la animación por ordenador suponen un reto y al mismo tiempo un campo de experimentación en el que los creadores pueden desarrollar su libertad artística con su imaginación como único límite. Pero tras los trazos se desarrolla un proceso donde todo debe estar calculado y controlado al milímetro con un enorme esfuerzo para trasladar las ideas al ordenador, creando imágenes de una gran fuerza visual.
Robert Kondo. Remy en la cocina (Ratatouille, 2007). Ilustración digital. Disney Pixar
En la exposición se desvelan las fases del proceso de producción seguido por una película de Pixar Animation, lo que nos da una idea de la complejidad de su realización. Se comienza con el guión, que dará lugar al Storyboard y el Sotryboard digital, pasando por el Colorscript; la siguiente fase comprende el diseño de personajes y decorados, los estudios de modelo, las maquetas y la grabación de los diálogos; después llega el modelado y el Rigging, un complejo proceso que comprende el Layout, colocación de la cámara, la animación y su pulido, el Shading y el texturizado, el pelo y la iluminación; posteriormente se lleva a cabo la renderización, teniendo en cuenta el principio de los 24 fotogramas por segundo para crear una sensación de movimiento lo más realista posible; y, por último, el sonido, la música, los efectos sonoros y la mezcla final.
Ricky Nierva. Dory, Nemo y Bruce (Buscando a Nemo, 2003). Tinta, rotulador y líquido corrector sobre fotocopia
El Caixa Forum ha programado toda una serie de actividades complementarias a la exposición como proyecciones de cine familiar, visitas guiadas a la exposición, actividades infantiles en torno a la muestra, visitas escolares dinamizadas y comentadas, así como un ciclo de conferencias que girarán alrededor del mundo del cine de animación.
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